En el país de los cuentos,
zorros y brujas, lobos hambrientos,
gobiernos seguros, políticos contentos.
En el país de los cuentos,
jóvenes dormidos, amaneceres cenicientos,
parados a miles, ladrones a cientos.
Ya lo dice el refrán:
A mal color, más azafrán,
a falta de magia, más hechizos
y a falta de pan…, chorizos.
¡Qué pena que solo queden cuentos
con finales tristes
donde ya no hay príncipes valientes
dispuestos a saltar muros
y a derribar puertas
para despertar
a todas las princesas muertas!