lunes, 23 de marzo de 2015

CUENTOS Y ROLLITOS DE PRIMAVERA



…Ese día, por sorpresa y sin que viniera a cuento, aquél puñado de políticos decidió saltarse las normas y ser honrados hasta la puesta de sol.
Los pobres del pueblo creyeron que se había vuelto locos.
Los ciudadanos ricos no salían de su asombro.
¿A quién beneficiaría semejante decisión?–intentaban adivinar  unos y otros-
Para algunos, la única ventaja es que se ahorraban las comisiones…
Pero…   ¿qué pasaba con los acuerdos verbales?    –quiso saber  la mayoría-
¿Y las subvenciones apalabradas?                        
 –se preguntaba el resto-
Cuando los mandatarios vieron que habían metido la pata, quisieron volver a pisar terreno firme, salieron al balcón y rectificaron a tiempo diciendo que se trataba de una broma. Entonces, todo el mundo respiró aliviado y pudo disfrutar de una bella puesta de sol…

M.M.C.

martes, 17 de marzo de 2015

CANCIÓN DE JUAMPEROLAS



Ahora , que no le queda nada
y nada necesita,
por fin es libre.
Ahora, que no hay quien le pida,
se basta a sí mismo
para dormir a pierna suelta.
No hay favores pendientes que pagar
ni tiene a quien llorar cuando se mueran.
Hoy, liberado de cargas, puede descansar,
pues Hacienda se conforma con lo suyo
y los políticos se ganan el pan
con el sudor de su frente.
Como no tiene compromisos
ni plazos de entrega
y no come, ni bebe, ni fuma,
piensa que se ha ganado el derecho
a mearse donde quiera.

No tiene trabajo fijo
ni está atado al paro.
Su mujer no para en casa.
La radio tampoco funciona.
Ahora,  que por fin terminaron la carrera,
los hijos le han alojado en  una residencia,
se han hecho cargo de su casa
y de sus cosas
y se han independizado.
Ahora puede morir tranquilamente.
Ya ha ordenado todos sus asuntos,
vacunó el perro,
el gato está criado…
Y Dios se las arregla solo.

m.m.c.

viernes, 6 de marzo de 2015

EL ESCRITOR



Cuatro días después de la presentación de su décimo tercer libro, el editor lo llamó a primera hora de la mañana y le dijo:
-Tengo una noticia buena y otra mala.
La primera es que la edición está agotada desde ayer.
La mala es que hemos metido la pata, porque te llueven las críticas.
¿Qué hacemos? –Le preguntó_
Juamperolas, llevándose las manos a la cabeza, respondió vociferando:
-¿Ahora que por fin me leen, me preguntas qué hacemos?

¡Por Dios bendito! ¡Reeditar hasta que escampe!

m.m.c.

martes, 3 de marzo de 2015

PALABRAS DE JUAMPEROLAS



Hijo mío,
en esta tierra que pisas,
quien no se espabila
y aprende a ser bien manejado,
jamás llegará a ser un buen pobre.


Las cosas cambian, hijo mío.
En mis tiempos,
para acabar con los restos de comida
después de la barbacoa,
los ricos traíamos un pobre a casa
todos los fines de semana.
Hoy, masticamos un orbit.

M.M.C.