“Las
cosas que no sirven no se tiran”
-decía mi
abuelo, cuando inventaron
los espacios
guardamuebles y las perreras-
Años
más tarde, cuando todos creían
que
los políticos corruptos eran ya
una
especie decadente y próxima a extinguirse,
un
defensor de la máxima de mi abuelo
sorprendió
a su pueblo,
creando
una nueva y original Asociación:
La
Protectora de Concejales.
m.m.c.